El 20 de octubre de 2025, José Madero ofreció una conferencia de prensa en la Ciudad de México para compartir detalles sobre el que será el show más ambicioso de su trayectoria: su presentación en el Estadio GNP, recinto que ha recibido a los artistas más grandes del mundo y que el próximo año se teñirá de morado para vivir el cierre de la gira “Érase una bestia”.

Desde el inicio, la conferencia tuvo el sello característico de Madero: detalles cuidados, pan de muerto con sus iniciales y una atmósfera íntima. Antes de su llegada, se proyectó un video que recapituló el éxito de su última gira, con múltiples sold outs en lugares como el Auditorio Nacional y otras ciudades del país, además de presentaciones internacionales.

El cantante apareció relajado, con humor y una apertura poco habitual, dispuesto a hablar sin filtros. Admitió que la autenticidad ha sido su principio creativo desde siempre: ser honesto con su arte, con su público y consigo mismo. “Nunca he buscado seguir modas; lo importante es que mi música sea un reflejo real de quién soy”, expresó. También compartió que muchas de sus canciones nacen de vivencias personales o de personas cercanas, y que esa conexión con la realidad es lo que da sentido a su obra.

Uno de los momentos más personales llegó cuando habló de su vida fuera del escenario: un José Madero normal, que asiste a conciertos, colabora con artistas emergentes y, como cualquiera, atraviesa etapas de vacío emocional. Reflexionó sobre si su éxito se debe a su arte o a su constancia, y concluyó con algo claro: no pienso detenerme.

Sobre su futuro inmediato, Madero reveló que entrará pronto al estudio de grabación para trabajar en un nuevo material, más introspectivo y oscuro. Esta vez quiero explorar mis pesadillas… a veces el arte más honesto nace de los lugares más oscuros. Hay que aprender a convivir con ellos y aceptarlos.

Acerca del concierto en el Estadio GNP, adelantó que busca ofrecer el show más largo y especial de su carrera, con temas que nunca ha tocado en vivo, covers de canciones que lo inspiraron y un escenario doble. “No me interesa hacer un sold out, me interesa que la gente diga: fue el mejor concierto de mi vida”.

También aclaró que el evento no será grabado ni comercializado, recordando su experiencia con Sinfonía Soledad, de la que no quedó satisfecho. Éramos jóvenes, se nota que estuvimos muy nerviosos, estábamos descoordinados, no usamos metrónomo… Simplemente, no es un buen recuerdo para José Madero.

Antes de cerrar, Madero respondió una pregunta que lo llevó a un momento íntimo: ¿Qué le diría al José de 19 años que apenas comenzaba en la música?
“Que se rodee de gente que lo ame, que lo sostenga. La vida de un músico es increíble, pero entre más éxito tienes, más problemas llegan. Hace dos años no pensé que habría tanto interés por verme en un estadio… no sé qué pensaría ese José».

Con un tono reflexivo pero determinado, José Madero dejó claro que este no es un cierre, sino una nueva etapa.

📍 Evento organizado por Class Fussion, a quienes agradecemos por la invitación y las atenciones durante la conferencia.